El bóxers de mi profesor (Parte 1) Regreso de la Aceptación

Cuando ya estábamos en la cena, que mi tío organizado para conocer a su nueva esposa  Marlene, yo sabia que esa señora no era buena para mi tío, pero se ve que mi tío es muy feliz con ella, así que no metí mi lengua en donde no importaba mi opinión.

Yo sabía que además faltaba muy poco para el ingreso a nuestro colegio, y además era mi ultimo año allí y además el primer año en colegio de Leonardito, porque mi padre lo inscribió muy pequeño en la escuela donde debería tener 12 años para ir a colegio pero en tres días cumplía los 11 años y también es el primer año de Ray y de Miguel en bachillerato o la prepa como algunos le dicen.

Mi padre, odia cuando nos queda una semana para entrar a clases, porque siempre es la semana más difícil para nosotros porque tenía que comprarnos el uniforme, mochilas cuadernos libros y demás cosas, además de bóxers.

Pero esa vez, mi madre era la encargada de comprarnos todo, además sabíamos que no utilizaríamos tantas cosas, porque en nuestro colegio, ya todo ahí, solo necesitaríamos un cuaderno, una bata de laboratorio y lentes de protección, ya había de todo, además es un colegio de puros niños con dinero

Solo faltaba una semana, y en esa semana, mi padre paso muy ocupado con su trabajo porque él quiere ponerse otra empresa en un país latinoamericano, solo nos saludaba y se reía con nosotros, sabíamos que él había pasado cuatro días con nosotros en la casa de lago de mi abuelo, había dejado todo atrás por nosotros su trabajo su celular, y además su negocios para pasar un tiempo con nosotros.

El día viernes, además de haber conocido a la nueva esposa de mi tío Angelo, conocimos a los nuevos hermanos de Theo, y además como mi tío Angelo tiene dinero, además él es arquitecto y construyo la urbanización, donde él vive con Theo, esta ayudando a pagarle los estudios a Saúl y Antonio, los nuevos hermanastros de Theo. 

Su madre, Marlene trabajado por muchos años, en la urbanización de alado de la casa de Theo, y se conocieron.  

Saúl era el mayor tenia 16 años, iba en un curso mayor que Theo, y Antonio el menor tenia 13 años y va a un curso mayor que el curso de Leonardito.

El día sábado después de la presentación de la novia de Angelo, fue muy difícil para nosotros porque sabíamos que nos teníamos que despedir de nuestras tías y primas, y además de nuestros tíos, primos y de sus vergas.

Los fuimos a dejar al aeropuerto, Yo conducía el BMW, que mi padre me lo regaló por mi cumpleaños mi padre manejó su carro y Angelo otro, para ir a dejar a mis tíos para que recepten su vuelo, yo sabia que solo era cuestión de tiempo para volvernos a encontrar y si es posible, iba a mejorar para pasar de rango. 

Ya luego descansamos, yo aun no había conducido mi carro desde la aventura que tuve con mi padre y Rubén,  me daba pereza, utilizarlo además lo había dejado en el garaje, era domingo y nos toco bañar a los cachorros que ya tenían 3 meses de haber nacido, y además nos terminamos de bañarnos nosotros con el shampoo de los perros.

Luego de eso, entramos a la casa, y nos bañamos, porque nosotros éramos los que apestábamos a perro mojado, y además nuestra madre, nos retó porque nosotros siempre ensuciamos la casa, y los perros no.

Luego en la noche, bajamos para pedir pizza, porque teníamos muchísima hambre, y además sueño y frio, en media hora llegó el señor de la pizza, Miguel y Ray pagaron la pizza con el dinero dado por mi padre, y nos sentamos a comer, mientras veíamos televisión.

Después empezó a llover y nos dimos pena porque los perros se estaban mojando, mi madre, ya se había ido a dormir.  

Con mis hermanos y mi padre, entramos a los perros a nuestro cuarto Ray y Miguel pusieron papeles, para que no ocurriera ningún accidente tipo perro.

Entramos a todos los cachorritos y sus padres que en total son 9, y dormimos con ellos.

Ya a la mañana siguiente, mi madre, se fue a trabajar y mi padre, se estaba alistando para el también irse a una sesión de trabajo que tenia.

Inés, llegó y nos hizo el desayuno y luego se fue porque tenía unos asuntos por resolver, porque se estaba divorciando de su esposo, y quería la custodia de su hija.

Sabíamos que se iba a demorar, y además mi madre, me dijo que a las 11:00 am vaya a recogerla porque nos íbamos a comprar los uniformes que utilizaríamos, para el ingreso a clase. 

Yo no estaba de humor, además estaba jugando con los perros, con mis hermanos en mi cuarto y no me quería bañar. 

Recibí una llamada de Valeria, diciéndome que ella también iría pero un poco más temprano, y que su hermano que esta en un curso mayor que Leonardito, también iría.

Su hermano se llama José, era un poco tímido, conmigo y lo sigue siendo, además es un poco celoso, con su hermana, y creo que no me he ganado su amistad.

Era su segundo año en nuestro colegio, sabíamos que nuevos alumnos que nosotros conocíamos iban a entrar en nuestro colegio, como José, Saúl y Antonio.

Eran ya las nueve de la mañana, tuve que vestirme, porque mi madre, se enojaba conmigo por no estar a tiempo, elegí la ropa que mis hermanos llevarían puesta ese día, sus bóxers y todo eso.

Llevamos a los cachorros a su casa, y sus padres venían tras de ellos, y los encerramos porque a veces los padres se van hasta los caballos de mi padre, y estos pueden matar a los cachorros, con solo pisarlos.

Subimos, a nuestro cuarto, yo no sabia que hacer para matar el tiempo, aun faltaban dos horas, y estaba arto de tener relaciones sexuales, y se me metía a la piscina tenia que cambiarme de ropa, secarme y cambiarme de ropa de nuevo.

La única opción que tenía era ir a la sala de videojuegos con mis hermanos, estuvimos probando los nuevos juegos que le hicimos comprar a mi padre, y Leonardito, había salido de la habitación y se fue al baño.

Miguel: Saben hemos pasado dos semanas de locos, es algo inexplicable.

Ray: Es verdad, nunca me imagine esto.

Yo: Hagan silencio, yo tampoco sabía nada, Leonardo no tiene que enterarse por ahora,

Luego de eso solo habían pasado 15 minutos, de mi fatal destino, cogí las llaves del BMW, y les dije a mis hermanos que los esperaban en 5 minutos en el carro, porque nos íbamos a un centro comercial, para ver que había de nuevo, mientras ellos apagaban  guardan los juegos en el estante que tenemos.

Ya en el carro, esperamos a Leonardito, para que se suba, y además ya estaba llegando Inés, y la dejamos en la casa.

Ray era mi copiloto, mientras que Miguel y Leo, iban atrás.

Pusimos, canciones en inglés, porque son nuestras favoritas, y así practicamos nuestro inglés, además acá en Sevilla, es poca la gente que practica otro idioma, que no sea el español castellano.

Luego maneje por 30 minutos hasta llegar a un centro comercial, además el más cercano al trabajo de mi madre, por lo menos unos 15 minutos, dejé el carro estacionado, y además tenia dinero que me habían dado por mi cumpleaños 18.

Subimos, al centro comercial, para ver que había de nuevo, y vimos cada tienda así sea para perder el tiempo, me gustaba los zapatos, que venden, pero ya no quiero más, porque a veces es difícil pensar que par de zapatos me pongo al día.

Fuimos a la zona de comida, y les compre un helado a mis hermanos y uno para mí, mientras veíamos a la gente, y conversábamos acerca de lo que había pasado con los perros en la noche que tuvimos.

Luego fui hasta el baño, orine, y había un señor, que me miraba, pero este señor no miraba mi verga sino me miraba de cabeza a pies, me guarde mi verga en mis bóxers y me subí el zipper del pantalón me lavé las manos y fui donde mis hermanos estabas degustando sus helados.

Me senté con ellos, porque ellos son mi mayor prioridad en mi vida, puedo dejar que se lleven a Valeria, pero mis hermanos nunca, matarían por ellos, cuando el señor se me acerca y me mira y se me sonríe. 

Yo: Buenas, disculpe necesita algo.

Daniel: Ya no se acuerda de mi joven.

Yo: No creo, nunca antes lo había visto.

Daniel: Me haces una broma o que.

Yo: Disculpe no se de lo que habla.

Daniel: Soy yo señor Franco, su profesor de matemáticas.

Yo: Hola, profe, disculpe no lo había reconocido, esta cambiable.

Daniel: Si salí, del colegio y me metí a un gimnasio, porque ya tenia tiempo sin entrar a uno.

Yo: Bueno, eso era bueno, ya habían sido tres meses largos.

Daniel: Bueno y tu, que haces aquí.

Yo: Pasando el tiempo, con mis hermanos.

Daniel: Bueno tienes hermanos.

Yo: Si, ellos son Leonardo, va a su primer curso de colegio, y ellos Ray y Miguel van a bachillerato.

Daniel: Ellos entonces son mi presa fácil.

Yo: Bueno, no profe, ellos son excelente en matemáticas, además trátelos bien, profe porque son mis hermanos. 

Nos despedimos de mi profesor, y miré que estaba con su esposa, que era profesora de la escuela, y nos reconoció, y además tenia un bebe de unos dos meses.

Ray: Quien era ese señor.

Yo: Bueno él es el profesor de Matemáticas para preparatoria o bachillerato, se llama Daniel Ortega, pero ustedes tienen que decirle licenciado, porque así le dicen todos.

Miguel: Y tu porque le dicen profe.

Yo: Bueno, además de que soy guapo, soy un excelente alumno, soy el primero de mi clase, además espero graduarme con honores, y la confianza que existe entre yo y el profesor es muy grande, si quieren ganarse su confianza sean buenos estudiantes, y además si el necesita ayuda, ayúdenlo.

El profesor Daniel, estaba guapo antes en las clases, era un poco obeso para tener 34 años, pero cuando ese día lo vi, creo que me enamoré de él, estaba irreconocible, estaba ya flaco, y se le notaban los músculos de la pierna y de sus brazos, no pude mirar su bulto, por respeto, pero creo que se ve mejor así flaco, su cara y su sonrisa mejoraron y había cambiado de peinado, cuando se fue pude mirar su culo, y lucia bien en sus shorts, y también pude ver que utilizaba bóxers creo que era la primera vez que él me causaba una erección. 

Terminamos nuestros helados, y nos fuimos ver que habían compre dulces, y nos fuimos pues ya solo faltaban 30 minutos para ir a ver a mi madre. 

Fuimos al carro, y nos quedamos allí, porque recibí un mensaje de Eder, diciendo que había un nuevo uniforme para los chicos del último curso.

Yo sabia de eso, porque me había contado Valeria, pero la llamé y me dijo que tuvo que salir de la ciudad y no volverían hasta el miércoles.

Maneje hasta el trabajo de mi madre, y nos bajamos a ver el hospital, siempre entramos, además el sueño de mi madre es que alguno de sus hijos sea el dueño de su hospital, así como mi padre que quiere que uno de nosotros seamos el dueño de sus empresas.

Ya faltaban 10 minutos, fuimos al área de Pediatría, ya que allí trabaja mi madre, con Iván y mi hermana, la saludamos, y luego salimos con mi madre, luego de eso, nos subimos al carro, y me dio la dirección de donde quedaba el lugar donde vendían todos los uniformes.

Era una dirección muy extraña, pero en 10 minutos llegamos, en el lugar.

Cuando entramos, estaba vacío, además vendían uniforme de otros colegios, como dos o tres lo más importantes de Sevilla, luego nos atendieron dos chicas y un chico, que estaban en la tienda.

Mi madre, les dijo que necesitaba uniformes para nuestro colegio, y primero atendieron a Ray y a Miguel, me quede sentado con Leonardito, jugando con nuestros celulares.

En mi colegio, hay tres uniformes, uno que usualmente se utiliza casi todos los días, otro para deportes y el último para evento especial pero solo lo utilizan los del último curso, porque son los que más tienen eventos especiales.

Mis hermanos, salieron con su uniforme, bueno nuestro uniforme es casi como un terno, la parte de arriba del  esmoquin, es de color caqui, con una terminación de pingüino, y un short de tela azul marino hasta las rodillas, con una camisa blanca y un corbatín azul marino, y les iniciales de nuestro colegio, en el lado izquierdo del esmoquin, el uniforme de deportes, era único era un calentador azul, marino con las iniciales del colegio, una camisa celeste, y además un short color azul marino, y una gorra; para las mujeres era lo mismo, solo que ellas utilizaban faldas y además utilizaban chaleco en vez de esmoquin.

Mis hermanos, salieron con ese uniforme, se veían hermosos, la cola de pingüino les lucia bien, a mis hermanos y el pantalón se ve un rico bulto, a mis hermanos ya que me causaron una erección.

Luego de eso, entraron de nuevo y se probaron el uniforme de deportes, y se les veía muy bien, y además ya era muy rico, sus nalgas, mi erección no me bajaba y llego mi turno.

Me atendió el chico, que había porque las chicas guardan el uniforme de mis hermanos en una funda, el chico me miro, pensé que era gay, tenía unos años más que yo. 

Gabriel: Mi nombre es Gabriel, y te ayudaré hoy, por favor quítate la ropa y quédate en bóxers para pasarte la ropa. 

Yo no sabia si quedarme en bóxers, además mi madre, estaba afuera de los vestuarios, y además era vergonzoso, porque mi verga aun estaba erecta, y se veía bien parada en mis bóxers, blancos que me puse ese día.

Gabriel, fue a buscar el uniforme de deportes, me quite la camisa, y los zapatos, pero no sabia si quitarme el pantalón porque aun mi verga se notaba y mucho.

Gabriel: Vamos, toma el uniforme de deportes, anda quítate, el pantalón.

Yo: Bueno, tengo un problema.

Gabriel: Mira si tienes vergüenza por tu madre, le diré que se vaya un rato, ya le está dando el uniforme a tu hermano menor. 

Yo: Bueno, gracias.

Gabriel hizo lo que me prometió y me quite mi pantalón, me puse el uniforme de mi colegio, y salí para que Gabriel, me mirara para ver como me quedaba el uniforme.

Lo primero que hizo fue mirarme el bulto, y luego exclamo alto, luego miro como mis músculos, lucían bien.

Gabriel: Puedo preguntarte algo.

Yo: Si dime.

Gabriel: Te quitaste tu pantalón.

Yo: Si porque.

Gabriel: Bueno se nota un gigante bulto, en tu cremallera.

Yo: Bueno, no es mi pantalón, es mi verga.

Gabriel: Bueno lo siento, y además felicidades por tenerla grande.

Me dijo, que estaba bien, y que me daría el otro uniforme que utilizamos diariamente, salió y regreso tan rápido como pudo, yo no he había quitado todo el uniforme, recién me había quitado la camisa y en pantalón me faltaba el short.

Espere que saliera de los vestidores me quite, el shorts, y me quede en mis bóxers blancos con mi verga translucida en ellos, luego me puse la camisa, y el esmoquin, pero todo me quedaba menos, el short de tela.

Salí de los vestidores a avisar a Gabriel, que me de una talla un poco grande, porque el uniforme parecía de niño, estaba muy apretado, pidió disculpas, pero solamente miraba mi bulto, que es ese momento era más reconocible por el shorts de tela, pequeño, regreso con uno, y una talla más grande, y me la dio y que quedaba perfecto, fui donde mi madre, para que me vea, y le gusto como me quedaba el uniforme. 

Cuando, mi madre le dijo a Gabriel que me llevará el otro uniforme.  

El otro uniforme, era un poco más lujoso, un pantalón blanco, y una camisa celeste, zapatos de vestir negros y una corbata blanca, con las iniciales bordadas en ella con un color dorado. 

Fui de nuevo, hasta los vestidores, y me quite la ropa, que tenia y me quede en bóxers blancos, y entra  Gabriel y me ve los bóxers, pero tenia tapado aun mi bulto, con la camisa blanca que aun me estaba quitado del uniforme.

Gabriel: Toma el uniforme especial, espero que tengas un bóxers blanco, para que no se te vea.

Salió a toda prisa, mientras yo tranquilamente me probaba el uniforme sin refunfuñar porque mi madre me retaba en frente de todos, a los 5  minutos salí, y me gusto como quedaba en mi cuerpo, me veía como si me hubiera ejercitado el doble de lo que tenia, aunque mi bulto seguía allí, creo que al verme yo mismo con esos uniformes no dejaba de que mi bulto se tranquilizaba.

Salí, y mi madre, le gusto el uniforme, y luego vi a Leonardito, que también salían de los vestidores, con su uniforme de deportas que se le veía bien elegante y su culo bien formado y violado por mi verga.

Fui ya a los vestidores a cambiarme a mi ropa, para que guardaran los uniformes en bolsas.

Cuando ya estuve allí, no había nadie aun, me quitaba la ropa, y entra Gabriel a los vestidores.

Yo: Que pasa cabrón, me haces asustar.

Gabriel: Lo siento, pero tu madre, quiere ya el uniforme.

Yo: Mi madre, no te dijo eso, porque la conozco y sé que no me apura (Le mentí)

Gabriel: Bueno, no me lo dijo.

Yo: Estas aquí para otra cosa.

Gabriel: Bueno, eso creo han venido muchos chicos pero nadie como tu.

Yo: Ya sé.

Me termine de quitar los zapatos y el pantalón blanco, los deje allí, y así solo con bóxers y mi verga parada hice entrar a los vestidores a Gabriel, para que me mirara en bóxers, su cremallera aumentaba de tamaño, pero no tanto.

Luego quise ver su reacción, y poco a poco me fui bajando el bóxers, y además la presencia de mi vello púbico ya era notable, hasta que ya el tronco de mi verga blanca y erecta se fue notando más, hasta que mi gigante cabeza saliera a la luz, y Gabriel se quedo impresionado por lo que acababa de ver.

Gabriel se apresuró en tocarme la verga, pero yo lo esquivaba, un grito de mi madre, diciéndome de que ya nos iríamos lo hizo salir de los vestidores con todo el uniforme, mientras yo me subía el bóxers que lo tenía en las rodillas, y me colocaba  mi sudadera negra y mis jeans de Calvin Klein y unas sandalias que tenia puestas.

Mi madre, se despidió de todos, ya había pagado, y le habían comprado dos pares del uniforme a mis hermanos y a mi solo una, porque mi uniforme era el más caro.

Nos subimos al carro, y vi como Gabriel salía de la tienda a despedirse de nosotros o de mi verga, que ya no sufría una erección mortal, no sabia como reaccionar porque mi madre, me miraba con una cara de intriga, pero al final no me dijo nada.

Martha: Lleva a tus hermanos a la casa, y déjame a mi en mi trabajo.

Yo: No nos, comprarás los bóxers.

Martha: No, ya hable con tu padre, de esto.

Ray: Él nos llevará.

Martha: No lo sé.

Miguel: Y las mochilas, y cuadernos.

Martha: Ya tu padre, les compro para ustedes, después de salir de su trabajo ya están en su cuarto.

Maneje hasta el trabajo de mi madre, y la dejé allí, luego conduje hasta la casa, y llegamos baje las fundas de ropa, con la ayuda de mi hermanos, y Leonardito, subió un cachorro hasta nuestro cuarto, donde estábamos ya cansados de lo que había pasado, y lo único que quería era dormir. 

Continuará....