Llegamos a la casa, Leonardito entro emocionado para jugar
con Miguel y Ray, y yo me quede afuera en el garaje, con mi padre.
Adolfo: Bueno hijo, que quieres decirme.
Yo: Veraz, padre creo que yo no te he pagado, lo que haz
hecho por mí.
Adolfo: No tranquilo hijo, no me debes nada.
Yo: Si padre, creo que te debo, un bueno no se como decirlo.
Adolfo: Crees que me debes una mamada, por lo que hicimos,
cuando nos escapamos de los demás.
Yo: Si padre, creo eso, pero…
Adolfo: Bueno hijo, tranquilo, no me debes nada, solo te
pido de que tengamos la misma confianza de antes de que tuvieras tu primera
eyaculación.
Yo: Está bien, padre. Gracias.
Abrace a mi padre, lo olí, pensé que tenia un león con
nosotros, y que si volvíamos a repetir todo, y si yo chuparía su verga gigante.
Entramos a la casa, riéndonos, yo subí a mi cuarto, a
seleccionar la ropa que estaba limpia o sucia, para que la lave Inés, y luego
de eso me di un baño, me puse unos bóxers ajustados y me tiré a dormirme.
Eran las nueve de la noche, y yo estaba cansado, Leonardito
se había quedado a dormir en mi cama, y mi madre fue a dejar a Valeria a su
casa.
Al siguiente día me levante en la tarde, solo comí un poco y
seguí durmiendo, mis hermanos también dormían, estábamos muy cansados, en la
noche solo vimos películas hasta las 3 am.
Ya era jueves, mi padre me levantó muy temprano pues iríamos
a la casa de Angelo, para ir juntos a comprar bebidas y la comida, para la
presentación de su novia y los hijos de la novia, que yo no los conocía
Mis hermanos, se quedaron en la casa de Theo, jugando
videojuegos, y nosotros fuimos al supermercado, mi padre estaba muy feliz por
eso, porque ya Angelo tenia por lo menos 8 años, de separados con la mujer.
Yo: Tío y por lo visto, que hacías en esos ocho años de
separados con la madre de Theo.
Angelo: Sobrino, contrataba culitos.
Yo: Putas?
Angelo: Si putas y además maricones que se me tiran.
Nos reímos mi padre, estaba muy emocionado porque Angelo,
también lo ayudo cuando mi padre y mi madre se casaron.
Compraron mucho vino y cerveza, aliños para los pescados, y
demás.
Luego de eso, pagaron y nos subimos al carro, con las
compras, era la primera vez en ocho años, que veía a mi tío tan feliz.
Le compró algo de comer a Theo y a mis hermanos, y manejamos
hasta la casa de mi tío de nuevo, allí mi padre le dijo que no se preocuparé
más y que se preparé.
Luego de eso, revisamos lo que faltaba, así que teníamos que
estar listo pues nos quedaban dos días.
Angelo: Hermano te puedo pedir un último favor.
Adolfo: si dime hermano.
Angelo: Te puedes llevar por unas cuantas horas a Theo y
dejarme un rato a Roberto, para que me ayude con algunas cosas.
Adolfo: Veras andamos solo en un carro.
Roberto: No te preocupes, padre, yo puedo ir en taxi.
Angelo: No sobrino, ya mismo te iré a dejar y recogeré a
Theo.
Adolfo: Si es así, estamos bien, te dejo a Roberto por un
rato.
Mi tío entro a su casa, para llamar a mis hermanos y a Theo,
mis hermanos se subieron al auto, mientras que Angelo hablaba un rato con Theo, se apartaron un poco, pero se veía como
si estuviera aconsejando.
Mi padre también me empezó a hablar.
Adolfo: Hijo, cuidado te tiras a tu tío, porque es algo gay
cuando un hombre esta con él.
Yo: No te creo padre.
Adolfo: Si hijo.
Yo: Bueno solo lo quiero ayudar.
Por mi cabeza, ya pasaba todo lo que iba a suceder con mi
tío.
Cuando luego de eso, mi tío vuelve con Theo, y yo lo abrazo
y le doy un beso en la mejilla.
En España, es muy común darle besos así sea a hombres es
como un “saludo”, pero yo beso para ser cariñoso.
Theo solo se sonrió, y caminamos al carro, mi padre se subió
para manejar y le di las llaves, y ellos se fueron.
Esperamos un rato afuera con mi tío, y entramos a su casa.
Nos sentamos en la sala, de mi tío él se saco los zapatos, y
yo también lo seguí y me dio unas pantuflas para sentirnos más cómodos.
Angelo: No se si hacer esto.
Yo: Que cosa tío, que no quieres hacer.
Angelo: Presentar a Marlene, a sus hijos Saúl y Antonio.
Yo: Bueno tío, solo quiero que tú seas feliz además, de que
Theo sea el primero, en tu vida, porque es como mi hermano, y si esa señora le
hará daño juró que la demandaré.
Angelo: Jaja, Gracias Roberto, pero esa señora ama mucho a
Theo, y además no creo que le haga daño, porque ella cree que es uno de sus
hijos.
Yo: Esta bien tío, y para que me necesitabas.
Angelo: Bueno verás, sobrino en la iniciación, me enamore de
tu verga, y quiero que tu seas mi ultima relación homosexual.
Yo: Bueno tío, yo estaba listo para aguantar tu verga.
Angelo: Quiero que tu me la metas.
Mi tío se levantó de su silla, y me empezó a besar, como
loco, luego me quite la camisa, y lamía mis tetillas, y así lamio mi six-pack y
solo cerré un poco los ojos y cuando ya los abrí de nuevo, mi tío ya estaba
desnudo,
Luego me beso de nuevo, mientras con sus manos, me quitaba
el cinturón de mi pantalón, y tenia un bóxer azul, con abertura en la verga, mi
tío me sacó la verga por allí y me la empezó a chupar mientras mis expresiones
cambiaban seguidamente, como si quisiera ya explotar.
Luego de eso, me quité mi pantalón pero me dejé el bóxers,
mi verga estaba afuera de la abertura de la verga, y mi tío, se levantó, cogió
mi verga
Angelo: Ven, papi, sígueme.
Yo: A donde.
Angelo: Solo sígueme.
Mi tío no soltaba mi verga, y tuve que seguirla mientras
subimos las escaleras, y entramos a su cuarto.
Angelo: Quiero probar contigo, la nueva cama de agua que me
compre.
Sacó un condón de su cajón, y tenia un calzón rosado, yo lo
cogí y lo mire.
Yo: De quien es
Angelo: Mío acaso tu no tienes un fetiche con eso.
Yo: Solo tienes uno.
Angelo: Tengo dos más, quieres que los saque.
Yo: Si sácalos ahora.
Angelo sacó otro calzón tipo hilo, debajo de su cama y otro
en el armario.
Angelo: Cual quieres que me ponga.
Yo: Sabes yo encuentro repugnancia con esto, quiero que los
quemes.
Angelo: Bueno.
Luego de eso, me tiré en la cama, y me movía, luego de eso mi tío sacó el
condón de su empaque, y se lo puso en la boca, y luego se dirigió a mi verga.
Con una mamada, el condón estaba puesto en mi verga, lo más
rico era, que mi tío me chupaba mi verga con un condón de sabores, puesto.
Luego se puso mi verga en su culo y empezamos a follar como
locos, pero no me gustaba hacer el sexo en una cama de agua.
Angelo: Te encuentras bien.
Yo: No me gusta esta cama de agua.
Angelo: Bueno vámonos al piso, que te parece.
Él se tiró al piso, y yo cogí mi verga y se la metí en su
lindo ano, rasurado.
Y luego lo seguí follando, algunos gemidos se le salían de
su boca, desde gemidos leves como muy agudos.
Mi tío se puso en cuatro como perrito, y lo que hice fue
darle un beso negro, mi lengua jugaba con la entrada de su ano, y lo deje
dilatado.
Luego de eso le seguí metiendo mi verga dentro de su culo, y
seguimos, follando, mi tío se pajeaba su enorme verga por lo menos una más
grande que la mía por algunos centímetros, y ya no pusimos más saque mi verga
él se tumbó al piso, y la explosión de mi semen cayo en toda su cara, y además
en su cuerpo.
Mi tío también terminó en su cuerpo, musculoso por el gym, y
nos dimos un beso.
Nos levantamos y ya estaba totalmente desnudo y nos
abrazamos, su semen y mi semen estaba por todo nuestro cuerpo, jugamos con
nuestros líquidos expulsados de nuestras vergas, y el me lamio el semen que
había en mi cuerpo.
Nos metimos a su baño, pero solo nos dimos besos, y el
tocaba mi ya flácida verga, salimos limpios y me tiré a la cama de agua.
Angelo: Quiero darte algo más.
Yo: Que cosa.
Mi tío se dirigió al cajón de sus bóxers, y sacó cinco
bóxers, que ya no le quedaban pero estaban como nuevos, me los dio,
Angelo: Toma otra cosa.
De al final de su cajón sacó una caja pequeña.
Angelo: Toma
Era un anillo, que utilizaba de soltero mi tío.
Yo: Es tu anillo de soltero.
Angelo: Te mentí, con eso, es una anillo que me regalo mi
exsuegro pero ahora es tuyo.
Lo abracé y me vestí.
Él se vistió de nuevo, con su ropa, y tenía el culo abierto
por mi verga, nos dimos el último beso y salimos de la habitación, bajamos a la
cocina, para llevar todas las cosas a mi casa pues allí era la reunión.
Subimos todas las cosas al auto me subí como copiloto,
mientras mi tío manejaba pero yo cogía su verga en sus pantalones jeans.
Su verga se erecto e inmediato, pero ya estábamos a casi dos
cuadras de mi casa, y mi tío no hizo nada más que manejar.
Luego eso nos bajamos y sacamos todas las cosas, ya estaba
allí las mesas y las sillas.
Luego nos despedimos, mi tío no se dió cuenta de que me
había traído sus calzones junto a los bóxers que me regalo.
Se hizo de noche, y en la fogata, tiré los calzones de mi
tío.
Entre a mi casa, y guarde los bóxers que mi tío me dio.
Y me dormí junto a Leonardito.
Ya en la mañana siguiente, llegaron mis tíos y mis primos,
porque mis tías y mis primas se iban a hacer las uñas pues era su ultimo día en
España.
Nosotros ordenamos todo, pues la señora que mi madre siempre
contrata no podía ir pues estaba enferma, y mandó al hijo, con su sobrino pero
eran muy feos.
Y luego de eso ya estaba listo, los manteles y sillas, mis
tíos se fueron porque iban a comprar algunas cosas para su viaje de retorno a
sus países.
Luego solo nos quedamos nosotros y Angelo con Theo, ellos
luego se fueron y ya Inés, empezó a prepara los pescados, con la ayuda de otras
señoras.
Nosotros fuimos un rato a dormir, pues estábamos despiertos,
desde las 6 de la mañana.
Cuando ya nos despertamos almorzamos, y nos bañamos un rato
a la piscina.
Eder llegó y empezamos a hablar, y nos subimos a mi cuarto,
solo los dos.
Se fijó que la puerta este bien cerrada, me acosté en mi
cama y Eder se tiraba en mi pecho.
Nos quedamos solamente en bóxers, y nos besamos yo mordía
sus labios, y el lamia mi cuello.
Luego metía mis manos, en sus bóxers cogiendo sus nalgas, y
el metía sus manos cogiendo mi verga, y haciéndola parar.
Nos besamos por un momento, así mientras el chupaba mi
verga.
Escuchamos que alguien, tocaba la puerta de mi cuarto, pensé
que eran mis hermanos, pero ellos siempre gritan mi nombre.
Así que le dije Eder que se vista y que entre al baño, se
vistió rápido con su pantaloneta y su camisa, y entró al baño, yo solo me subí
mi bóxer y me coloque mi pantaloneta, y abrí la puerta para ver quien era.
Adolfo: Roberto, porque estas con la puerta cerrada, quiero
que me ayudes a seguir organizando todo.
Yo: Estoy esperando a que Eder, salga del baño, porque
quería utilizarlo.
Adolfo: Pero Eder, es como nuestro hijo, hubiera ido al baño
de la sala, nadie hubiera interrumpido.
Yo: jaja, tu sabes como es de vergonzoso, tu “séptimo hijo”.
Adolfo: Si es verdad, bueno apúrate que yo los espero abajo.
Vi que mi padre
bajaba las escaleras, y de nuevo cerré la puerta, y Eder salió del baño, mi
verga ya se había bajado y nos empezamos a besar, pero luego mi padre me llamó
y tuvimos que bajar y yo con la verga erecta.
Luego de eso, ya eran las cuatro de la tarde la fiesta empezaba
a las 7 de la noche, tuve que ir a dejar a su casa a Eder, porque era algo
familiar, aunque fuera casi como un hijo para mis padres, no podía estar.
Regrese y me bañe con agua helada porque tenía una calentura
que me había dejado Eder.
Luego ya me vestí me puse un bóxer blanco, con unos
pantalonetas blancos, y una camisa con cuadros azules y rayas blancas, y
zapatos azules, que mi padre y mis hermanos me dieron por mi cumpleaños.
Ayude a vestir a Leonardito, siempre me gusta verle su verga,
ya no la tiene como de un niño de 9 años sino como alguien de 15 años, la tenia
en realidad muy grande, siempre se la rozó con mis manos, causándole algunas
erecciones.
Lo vestí con unos de esos pantalones de moda rojos, los
mismos que yo tenía pero en blancos, y una camisa de Aeropostale azul, y sus
zapatos que el mismo los eligió.
Luego el me abrazó y nos acostamos en su cama, tocándonos
nuestras vergas por encima del pantalón mientras veíamos las vergas de Ray y
Miguel siendo encerradas por sus cárceles de tela.
Luego nos pusimos perfume y bajamos, para recibir a mis
familiares.
Cuando ya eran las 7 comenzaron a llegar y nos sentamos en
las mesas que estaban puestas en el patio, mi tío y Theo fueron a ver a Marlene
con sus dos hijos, por eso demorarían más.
Y luego llegaron, Marlene estaba vestida bien elegante,
tenia un vestido ceñido a su cuerpo y se les veía unas tetas bien paraditas y
un culito paradito, su vestido era de terciopelo rojo, y tenia una cartera
dorada que combinaba con sus accesorios, parecía una puta intelectual.
Sus hijos, eran más o menos, Saúl el mayor tiene 16 años,
era un poco más grande que Theo, tenía un pantalón y una camisa roja, era más o
menos como su madre, de tez blanco y de pelo casi negro, en cambio su hijo
menor llamado Antonio era un niño culoncito un poco gordito, y además tenias
unas tetitas ricas, tenia 13 años dos años menor que Theo.
Luego ellos se sentaron por donde mis padres estuvieron
sentados, era una mesa gigante con forma en u, por lo menos para todos
nosotros, mis tíos y sus esposas e hijos estuvieron sentados en los lados, mis
hermanas con sus maridos también, y Abu con mi abuelita estaban en medio, mis
hermanos con Alejandro, estuvieron sentados a un constado, mi padres, mi tío
Angelo y su nueva novia y “próxima esposa”, con sus hijos se sentaron en todo
el centro.
Empezamos a beber y a comer como tipos españoles que somos.
Mi tío empezó a presentar a su novia y los hijos de ellos, a
todos mis tíos y a mis tías, y se demoraban porque se quedaron conversando,
cuando ya llegaron en la parte donde estaba con mi abuelo, y mi abuela y mis
padres, mi tío nos presento a Martha pero me di cuenta que miraba a mi padre,
con ganas.
Sabía que no era, una mujer ideal para mí tío pero no quería
decir nada, porque ella necesitaba a una mujer en su vida.
Pero luego nos enseño a sus hijos, y me gusto Antonio un
rico niño de 13 años, con un increíble culo, pero yo creo que el que se enamoró
de mí fue Saúl, porque no dejaba de mirar mi bulto en mis bóxers de Calvin
Klein.
Luego de eso nos sentamos cada uno en las sillas, y
empezamos a servirnos tragos que nos traían los meseros contratados, para esta
celebración, mis hermanos estaban aburridos pues, y le pidieron permiso a mi
padre, que si podían subir a la sala a ver algunas películas con mis demás
primos pues esa era el último día.
Mi padre acepto, y mis hermanos fueron a llamar a mis
primos, pero menos a Alexis, porque estaba con su padre, además estaba hablando
con mis hermanas.
Subieron todos ellos, pero quedaban Theo, y Saúl y su
hermano Antonio.
Theo subió luego, y nos quedamos los tres abajo.
Yo me acerque a hablar con ellos.
Yo: Hola mi nombre es Roberto, mucho gusto, díganme quieren
subir, a ver la película que están viendo los chicos.
Saúl: No lo se.
Marlene: Tu eres el famoso Roberto, tu tío me ha hablado
mucho de ti.
Yo: Si yo soy.
Marlene: Vayan chicos, disfruten.
Antonio: Yo también puedo ir.
Yo: Si vamos.
Leonardito ya habia subido con mis hermanos, y al entrar con
Antonio su hermano Saúl, nos siguió por detrás, y lo esperamos, subimos las
escaleras y ellos miraban nuestra casa como si fuera algo de extremadamente
lujoso.
Antonio: Disculpe Sr. Franco, donde esta el baño.
Yo: Jaja, no me digas Sr. Franco dime Roberto, o solo Rob,
¿Quieres ir al baño?
Antonio: Si, en donde esta.
Yo: Espera un rato, vamos a dejar a tu hermano para que no
se pierda la función y te acompaño al baño, porque está un poco lejos y luego
te perderás.
Saúl: Bueno, está bien acompaña a mi hermanito.
Luego de subir al segundo piso, giramos a la izquierda y luego a la derecha, y
abrí la puerta donde estaba mis hermanos y mis primos, viendo la película.
Puse pausa, a un rato a la película que ya tenia más o menos
15 minutos de haber comenzado, y le dije que a mis hermanos que sean cordial
con Saúl; y muy rápido lo integraron al grupo.
Salí de nuevo con Antonio, y quería ir al baño de arriba el
de mi cuarto para ver que ocurría.
Subimos de nuevo las escaleras y le iba hablando.
Yo: Y te gustan que te digan Toño.
Antonio: Si, señor Roberto.
Yo: Solo dime Roberto, y que le pasó a tu antiguo papá.
Antonio: No lo sé, pero creo que mi mamá, me dijo que se
separaron por algunos problemas.
Antonio tenía una voz dulce, como si fuera un maricon.
Yo: Bueno ya llegamos.
Abrí la puerta de mi habitación y la cerré sin que Antonio
se dé cuenta, y luego fuimos al baño.
Antonio: Es muy grande tu habitación, y muy bonita, y el
baño también.
Yo: Gracias, anda a orinar que yo te espero.
Antonio, no podía bajarse el cierre del pantalón así que me
pidió ayuda, y yo lo ayude y aproveche en poner mis manos y tocar su bulto.
Entro al baño, y se bajo un poco el pantalón y pude ver que
utilizaba un calzoncillo, y entre.
Yo: No te importa si yo también orino a tu lado.
Antonio: No Roberto, está bien.
Yo: Bueno, gracias Toño.
Antonio: Dime Toñito, así me decía mi padre.
Luego de eso, me sonreí, y me baje el zipper de mi pantalón
blanco, y me baje el elástico, del bóxers para sacar mi verga en un poco más
que en un estado de flacidez, esta más o menos dura mi verga, me paré alado de
Antonio, y empecé a mear, y Antonio comenzó a observar el potente chorro de
orina que lanzaba mi verga, y el trozo de carne que salía de mi pantalón.
El termino, pero aun tenía sus pantalones abajo porque
seguía viendo mi verga.
Yo termino, y en eso lo ayudo a subirse su calzoncillo y su
pantalón.
Antonio: Wow, la tienes grande, mi hermano no la tiene así
de grande, solo he visto dos vergas así.
Yo: Gracias, como que haz visto dos vergas así.
Antonio: Si Roberto, vi la verga del novio de mi mamá, y
además la verga de mi papá.
Yo: Bueno, el novio de tu mamá, luego va a ser tu papá, y yo
seré tu primo, y Theo será tu nuevo hermano.
Antonio: Te puedo decir un secreto, Roberto.
Yo: Si dime.
Antonio: Me gustas tú y Theo, pero no se lo digas, yo
también lo vi desnudo, y casi me desmayó.
Yo: Si, él es mi primo.
Yo cogí mi verga con mi mano y ya estaba a punto de
guardarla, en mis bóxers blancos pero cuando la voz tierna de Toñito, me
detuvo.
Antonio: Roberto, puedo tocarla.
Yo: Si, si puedes pero si me prometes en que le darás
besitos.
Antonio: Gracias.
Mi verga se erecto de una, casi apuntando ya a la boca de
Toñito, y con sus dos manitas, y estaba entusiasmado en coger mi verga, y la
pajeaba pero sin tener nada de experiencia, y le comenzó a dar besitos, en mi
glande en mis bolas y algunos besitos de él fueron con saliva, que se
resbalaban por el tronco de mi verga.
Yo: Dale como una paleta o un helado de crema,
Toñito comenzó así, con una mamada, aunque sus dientes me
lastimaban el seguía así.
Luego de eso, lo cogí en peso, con mi verga afuera y mis
pantalones en mis tobillos, y salimos lo tiré en mi cama, y me quite los
pantalones, y también le quite los de él.
Su verguita por lo menos medía 10 centímetros, y estaba ya
erecta, estaba pequeña y un poco flaquita y sin circuncidar
Luego de eso, yo chupe por un rato, su verguita, y lo viré y
le comencé a besar desde su boca hasta el culito.
Le hice un beso negro pero el, se reía de lo que sentía así
que no me preocupaba tanto de todo.
Cuando de eso, le pongo la cabeza de mi pene a la entrada de
su ano, pero no lo penetraba aun quería que el sienta que si estaba listo.
Pero el abría las nalgas para que entrara mi verga, como en
son de ser follado.
Luego le cumplí su deseo, metí lentamente la cabeza de mi
verga en su culito virgen, pero comenzó
a llorar.
Yo: Que te pasa Toñito, que no me quieres.
Antonio: Si Roberto te quiero, pero me duele las nalguitas.
Yo: No te preocupes.
Cogí sus dos nalgas, y metí mi verga en medio de ellas, y me
comencé a pajear con su nalga, y a él si le gustaba.
Luego el quería seguir chupando mi verga, pero ya nos
habíamos demorado mucho.
Quería terminar en su culo, pero no podía meter mi verga
dentro de él porque luego lloraba, y me paje, algunas gotas de mi semen,
cayeron en su espaldita, y además en otras partes como en sus piernitas y en mi
cama.
Con una camisa, sucia limpie su espalda y sus piernitas,
pero al subir su calzoncillo, me dé cuenta de que había caído mi semen, en sus
calzoncillos.
Me dirigí a ver un bóxers de Ray, pues con el enorme culo
que tenía Antonio, pensé que le quedaría perfecto y si le quedo, lo ayude a
vestirse y tiré su calzoncillo a un lado de mi cama, pues tenía su rico olor a
culo.
Cuando ya iba a guardar mi verga, la cogí con sus dos manos
y le dio el ultimo beso, pero en realidad me limpio lo sobrante de semen, de mi
verga.
Luego me termine de vestirme, y salimos de mi cuarto, aunque
estábamos bien, yo ya tenia el sueño de que hacer una orgía mis hermanos, y
Theo y sus hermanos y yo, para follarme de nuevo a sus culos.
Bajamos a ver un poco la película, pero él se había quedado
dormido en mi regazo, y luego lo lleve en pesó porque nos estaban llamando para
comer.
Luego lo cogí en peso, y bajamos yo metía mis manos en sus
nalguitas, y lo tocaba hasta su penecito. Luego salimos al patio, y mi tío
cogió a Antonio, pero cuando él se sentó vi como ponía el culito de Antonio
junto en su bulto que se formaba en sus pantalones.
Luego comimos, y ya eran más o menos las 10 de la noche, nos
despedimos de mis tíos y de mis tías porque ya se iban a la casa de mi abuelo,
a prepararse para su vuelo que salía en la tarde porque necesitan descansar.
Solo nos quedamos mi abuelo, mi abuela, y Angelo con su
novia, mis padres y yo conversando. Miguel, Ray, Alejandro, Theo y Saúl habían
subido para jugar videojuegos un rato, Leonardito ya se había quedado dormido
en mis brazos.
Luego de eso, seguimos hablando y disfrutando.
Abu: Disculpe Marlene, y que espera luego de que si
posiblemente se casen
Marlene: Bueno Sr. Franco, me gustaría hacer una familia con
Angelo, y además de ser una madre para Theo y que Angelo fuera un padre para
mis hijos, y además no busco lujos porque yo mismo soy una mujer independiente,
solo que ya es tiempo para tener un esposo, y un padre para mis hijos.
Martha: Si porque Angelo se ha demorado mucho, espero que tu
seas una mujer propicia para Angelo, que seas una mujer, esposa y madre, para
ellos.
La conversación siguió luego, de eso ya se hizo tarde,
nosotros ya os despedimos, y fui a dejar acostado a Leonardito y llamar a Theo
y Saúl, porque ya se iban a su casa, mis padres entraron en la casa, y Abu y mi
abuela y su hijo Alejandro ya se iban y mis padres los fueron a despedir con
Angelo.
Salí al patio y estaba Marlene.
Marlene: Eres muy guapo.
Yo: Gracias.
Marlene: Pero si necesitas algo solo dímelo, puedo darte
algo si un me das lo que sabes.
Yo: Disculpa, pero si te vas a casar con mi tío, espero que
seas una mujer que valga la pena.
Marlene: Ay Cariño, lo siento quería ver como reaccionabas
porque tu tío me conto muchas cosas buenas de ti, además si quiero casarme con
tu tío, porque tiene una linda familia.
Yo: Bueno, disculpe Sra. Marlene, por pensar mal de usted.
Marlene: Gracias, pero déjame decirte que si eres guapo.
Ayude a Marlene, con su hijo que estaba, en una silla
dormido, y lo llevamos hasta el carro de Angelo, y nos despedimos.
Tuve una experiencia con ella, que no se si decir que fue
buena o mala.
wow mas por favor te sigo
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