En el trayecto íbamos hablando con nuestro padre, para
distraernos un rato.
Adolfo: Chicos lo que ocurrió en
la tarde, queda como un secreto entre ustedes y yo, esta bien.
Ray: Si, está bien, pero padre
seguiremos viendo tu gran verga.
Adolfo: Claro, hijo, y yo también
te veré crecer y tener una vergota, como la mía.
Ray: Pero recuerda yo no soy tu
hijo de semen y sangre.
Adolfo: No te lo dije, pero yo
conocí a tu padre, éramos muy buenos amigos en la universidad, yo era el
capitán del equipo de fútbol y él era capitán del equipo de básquet y nos
apoyamos como hermanos, un día sucedió todo ambos teníamos 20 años, y yo deje
embarazada a tu madre, la de ahora y él también dejó embarazada a tu madre, que
trágicamente te abandono.
Ray: Me puedes seguir contando
más de mi padre.
Adolfo: Claro, Luego de eso,
seguimos siendo muy buenos amigos, y a mi una vez me toco dejar cerrada los
baños del coliseo de la universidad y ver si todos los casilleros estaban
cerrados, para que nadie robe nada, y me quedé. Vi que una estaba abierta y
había una billetera era la de Paúl Villalobos, y no me di cuenta de que tu
padre estaba atrás mío y me dio un puñete en la parte de la nariz, me salía
sangre.
Yo: enserio, padre.
Adolfo: Si luego tu padre, se
asustó, solo éramos los dos allí, deje su billetera en el casillero y me senté
sobre una banca, y él me siguió me pidió
disculpa y que él no sabia que yo era el encargado ese día para dejar todo
cerrado, que si lo podía ayudar en algo, y le dije que si me podía llevar hacia
las duchas para lavarme la nariz.
Ray: Lo siento, padre.
Adolfo: Tranquilo, luego de eso
me acompaño, me ayudo a quitarme mi camisa para que no se me ensucie más de
sangre, y los zapatos, los calcetines y el pantalón para que no se me mojarán,
y me quede solo en slips.
Yo: Porque en Slips?
Adolfo: En ese tiempo, los bóxers
no eran tan famosos, estamos hablando 25 años atrás, luego la excitación nos
provocó, nos besamos y él se quitó la toalla, que tenía pude ver la magnitud de
su verga la tenia bien grande por lo menos 22 centímetros, y la mía aun no
llevaba a los 24, un momento a otro, nos pusimos a chupar nuestras vergas hasta
que terminamos en una excitación total, nos quedamos encerrados en los baños
por lo menos una hora, haciendo el amor como amigos.
Luego de eso, el termino en mi
cara, y yo regué mi semen en la suya, y eso fue el pacto de nuestra amistad,
luego nos secamos y el me dio un bóxer blanco, con una abertura en la verga, y
quedamos siendo los mejor amigos.
Yo: Espera, ese es el bóxer que
tienes puesto, y no que los bóxers no eran famosos.
Adolfo: El padre de Ray, era
estadounidense, además allá ya eran famosos, pero acá en España aun no, además
luego de todo ese tiempo, Paúl se mudó a vivir conmigo en la habitación en el
campus que tenia y nos basábamos y todo eso, pero bueno ambos teníamos una
relación de bisexuales, porque teníamos novias, además nosotros dejamos
embarazadas a nuestras novias.
Yo: Si, pero han pasado 25 años,
y aun tienes el bóxer.
Adolfo: Este bóxer lo tenia en
una funda, desde que Paúl, me lo entregó y lo utilizó en circunstancias
importantes, y lo decidí utilizar ahora, si el padre de Ray se retiró de todo
por dedicarse a su novia, y luego su esposa, además él era un estudiante de
intercambio y los padres, lo devolvieron a E.E.U.U y a su novia, para
cuidarlos, y no supe nada más de él.
Ray: En serio padre.
Adolfo: Si Rayo, tu padre y yo
fuimos muy buenos amigos.
Hablamos con mi padre, y el
camino se nos acortó y estábamos a la vuelta de la esquina de donde estaba mi
madre, mi padre estacionó el carro, y seguimos hablando.
Adolfo: Luego recuerdo, que una
vez, me llego un paquete de tu padre, y lo abrí y me envió fotos de tu primer
hermano y me envió una carta, diciéndome que si algún día regresaría a España,
haríamos lo mismo, que en el día en que nos conocimos; luego pasaron los años y
no recibí nada más de él, y bueno pensé que se olvidó de mí, yo me gradué en la
universidad y mis padres apoyaron a mi esposa para que terminé su carrera para
ser doctora, y luego después tuvimos a
nuestra segunda hija, ya teníamos dos hijas, y le compre la casa a ese señor y
empecé hacer mi imperio, y mi primer viaje a Estados Unidos, busque a tu padre,
donde antes tenia su casa en Georgia, pero luego la vendieron y se mudaron a
Texas, y luego no supe más de él.
Hasta que nació Roberto y lo
inscribí en una escuela militar, yo era el presidente de los padres de familia
y bueno hasta que una vez vi a tu padre, por allí pero no pensé que era
él.
Yo: Increíble.
Ray: Creo que yo me acuerdo de
eso, mi padre me contó, luego de eso vinimos a España, de nuevo porque nuestra
madre, nos abandonó mis hermanos cada uno hicieron de su vida, además yo no
sabia hablar muy bien el castellano, ni el inglés y mi padre tomó la decisión
de regresarnos, a España, cuando cumplí 6 me inscribió en el mismo colegio
militar que Roberto, y yo conocí a Roberto él estaba 3 cursos mayores que él
mio.
Adolfo: Luego la escuela militar
cerró y decidí ponerte a Roberto en el mismo colegio en donde estaban sus
hermanas y luego de 3 años mis hijas se graduaron y se fueron a la universidad,
y decidimos a adoptar a Miguel.
Yo: Luego, invité a Ray a nuestra
casa, porque éramos compañeros de salón, y…
Adolfo: Cuando fuimos a la casa
de Ray, ese día a pedir permiso, y toque la puerta, nunca pensé que me volvería
a encontrar con Paúl, mi viejo amigo de la universidad.
Yo: Padre, bueno una pregunta tú
y el padre de Ray, fueron novios.
Adolfo: Bueno hijo, se puede
decir que sí, unos besos y tuvimos nuestras citas, es por eso que me considero
bisexual, además he tenido relaciones sexuales con mis hermanos, y además
también disfrutamos de la verga de nuestro padre, en vez en cuando. Y bueno lo
salude, y es por eso que confió en mi para que te llevará a casa. En las noches
cuando Ray, estaba ya dormido, llegaba con vino a la casa de Ray y junto al
padre, conversábamos y todo eso, luego de eso.
Yo: Luego de eso que….
Adolfo: Luego de eso, comenzamos
a repetir nuestras cosas, lo hacíamos todos los días, hasta que una vez, me
dijo que tenía cáncer en la próstata, y que le faltaba poco para morir.
Ray: Si, eso hasta a mi me dolió
cuando me lo dijo.
Adolfo: Luego, de eso, lo invite
para que venga a la cena de Navidad con nosotros hablamos con tu padre, de todo
lo que nos habían pasado en la Universidad menos de las relaciones sexuales que
habíamos tenido, y ella decidió, que seriamos tus tutores, si algo malo le
pasaba a tu padre.
Yo: Si, eso es muy hermoso, pero
que es un tutor.
Adolfo: Bueno un tutor, es la
persona que está autorizada para cuidar de algo o de alguien es este, caso para
cuidar de Ray, yo fui su tutor, y bueno yo y mi mejor amigos nos despedimos,
luego de eso, yo le di un bóxer negro, y lo utilizó el día de su muerte, y
antes de eso, el dejo preparado todo, además se puede decir que él, era millonario
igual que yo, y dejo toda su herencia a Ray, Ray es millonario, pero yo le doy
su herencia cuando cumpla 18.
Ray: Queeee…
Adolfo: Tranquillo, además esa
gran cantidad de dinero tu padre, te dejo para tu alimentación, ropa, juguetes,
cumpleaños, educación, y al fin.
Terminamos la charla, Ray le dio
un gran abrazo a nuestro padre, y luego el carro se nos prendió solo, eso quizo
decir que el padre de Ray, aun protege a Ray, y salimos en busca de nuestra
madre.
Mi padre, toco la bocina del
carro, para que saliera mi madre y Leonardito, pero solo salió mi madre, y nos
hizo una seña para que entremos a la casa, de la amiga, luego de todo eso,
entramos y saludamos y nos sentamos allí.
Martha: Ellos, son mis hijos Ray,
y Miguel, y Roberto que esta con su novia, tú me entiendes.
Elena: Ahhh, pero si son tiernos,
y adorables, si querida te entiendo mucho, mi Juan, también salió con su novia.
Esa señora nos agarró de los
cachetes y nos dio un beso y su pintalabios rosado se quedo plasmado en
nuestros cachetes como un beso. Nos sentíamos cohibidos, porque nunca habíamos
visto a esa señora.
Martha: Él es mi esposo, es jefe
de varias empresas de aquí España y alguna de nivel mundial.
Elena: Hola, Adolfo, no te
acuerdas de mí.
Mi padre, se quedó paralizado esa
voz chillona, que tenía esa señora, era muy fuerte y ruidosa.
Elena: Soy yo Elena Ruales.
Adolfo: Si, me acuerdo de ti y
como has pasado.
Elena: Bien, y tu como así te
casaste, con Martha.
Adolfo: Una larga historia.
Elena: Me la imagino, toma
asiento por favor, ya regreso iré a verles un poco de té y galletitas.
Mi padre, le hizo señal a mi
madre, como para ya irnos, porque él no quería estar allí.
Elena: Y en que curso están, Ray
y Miguel.
Ray: Estamos en 9 curso y apunto
de pasar al decimo.
Elena: YO también tengo un hijo
en el mismo colegio, en el que ustedes están, pero un año menor que el curso de
Roberto, se llama Juan.
YO: Disculpe cual es el apellido
de Juan.
Elena: Se llama Juan Francisco
Torres Ruales.
Ray: Habla de Juan Torres.
Elena: Si lo conoces.
Yo: Si, lo conocemos.
Le di un codazo a mi hermano,
todos sabemos en el colegio que Juan, era un chico que era puto, se acostaba
con cualquiera, con tan de tener dinero y además, estaba enamorado de Roberto,
era gay, además no tenia ninguna novia solo novios y así, además actuaba como
afeminado, y en su casa era masculino, para que su padre, no se enteré.
Elena: Porque pusiste esa cara
como de asco, hijito, te paso algo.
Yo: No nada, no le pasó
nada.
Luego de hablar pasó una hora, y
esa señora no nos deja ir, luego tuvimos que actuar como si nos quedábamos
dormidos, para ya irnos, mi padre, nos cogió en peso, a Leonardito, a Ray y a
mí. Mientras que mi madre, se despedían de ella.
Mis padres se subieron al carro,
y mi padre manejo hasta casi, el lugar donde íbamos a comer, porque mi padre
tenía hambre.
Martha: Que lastima que se hayan
quedado dormidos, Ray y Miguel.
Adolfo: Ray y Miguel, levántense,
yo sé que no están dormidos, porque ustedes no roncan tan fuerte.
Nos despertamos.
Ray: Como supiste.
Adolfo: A mi no me engañas.
Martha: Gracias hijo, esa señora
si que no para de hablar me tenia ya cabreada.
Adolfo: Ella fue antes mi
secretaria, pero tú la despediste.
Martha: Enserio, ella era mi
amiga del colegio, y bueno.
Adolfo: Que más da.
Estaciono el carro, mi padre y
dejó durmiendo al pobre de Leonardito en el carro, mientras que pedíamos algo
de comer, paso 30 minutos y el local estaba a punto de cerrarse, y nos fuimos
hasta la casa, y nos quedamos dormidos hasta el siguiente día.
Era domingo, y nosotros nos
quedamos en la piscina todo el día mientras, que mis padres, nos servía helado,
con galletas, Roberto estaba dormido, parecía como si estuviera borracho, y
luego bajo y se tiró a la piscina.
Nadamos por media hora, y mi
padre, se metió con nosotros y mi madre, se quedó tomando el sol, en una silla.
Jugamos al voleibol, con mis
hermanos y padres, Yo me iba con Roberto y mi padre con Ray, y Leonardito jugaba
en una parte poca profunda de la piscina.
Mi padre, le pasaba rozando su
vergota por el culito de Ray, y Ray le cogía su verga, eso yo pude ver, mi
madre, como estuvo con su celular, y Roberto como estaba casi mareado no se
dieron cuenta.
Pasó un mes, y con mi padre,
actuábamos normal, solo cuando estábamos solos, nos quedábamos desnudos
tocábamos nuestros penes, y la interacción con él, siempre era mejor, desde el
día de la paga de mi regalo, él ya nos compraba más bóxers y todo, eso, solo
para que nosotros nos pongamos y actuemos como modelos, mientras él se hacia
una increíble paja.
El había cambiado, mucho ya nos
abrazaba más, conversaba con nosotros, si en el colegio nosotros teníamos
libre, el no iba a su trabajo para pasarla con nosotros, y en fin.
Un día, estando todos comiendo,
estábamos decidiendo donde sería el cumpleaños de Ray, y al fin decidimos que
seria en un Parque Acuático, que habían abierto en otra ciudad, más allá de
Sevilla, más o menos a dos horas.
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