Llegando a mi habitación, solo
estaba Roberto afuera esperándonos, y nos comenzó a retar, de que si íbamos a
ser novios, tengamos más cuidado de mis padres, porque si nos descubren
tendríamos serios problemas.
Entramos a la habitación después
de una larga retada de Roberto, y están todos mis amigos acostados, del sueño.
Ray: Que tal si vamos a jugar fútbol, un rato.
Alejo: Si me parece bien.
Roberto: Acuérdate que esta la
tienda de campaña en media cancha.
Ray: Si todos colaboramos en 10
minutos la tienda ya esta afuera.
Yo: Si, le diré a mi padre, que
nos ayude.
Javi: Si, tío, me parece, vamos,
y el que no juega es una niñita que le gusta la verga de Roberto.
Roberto: Jaja, ya estoy cansado,
mi verga necesita un descanso.
Todos bajamos a la cancha de fútbol, llame a mi padre, y en un abrir y cerrar de ojos, sacamos la carpa.
Yo: Bueno, yo soy el capitán de mi
equipo y que Javi, sea el del otro.
Javi: Bien.
En fin, en mi equipo quedo,
Roberto, Matt, Theo y Yo, y en el otro quedo Javi, Alejo, Ron, Ray, Pablo, y
pusimos a jugar a Leonardito para estar empates, de equipo.
Roberto y Ron fueron los
arqueros, y comenzamos a jugar.
Jugamos más o menos 1 hora,
cuando ya vinieron los padres, de mis amigos y uno a uno se fueron todos.
Solo nos quedamos mis hermanos,
Matt, Theo y Yo.
Padre: Theo, dice tu padre, que
no puede venir a verte, así que yo te voy a dejar.
Así que mi padre, mi madre y
Leonardito fueron a dejar a Theo a su
casa.
Roberto: Que tal si hacemos algo,
mientras vengan, he querido chupar la verga de ustedes, pero casi nuca lo hago.
Ray: Estas loco, esta aquí Matt,
y le dirá a alguien, tus sabes un secreto Franco nadie lo tiene que decir si no
es un Franco.
Roberto: Cállate, es hora que tu sepas
algo.
Matt: Bueno Ray, sé que tu
piensas de que yo soy el macho, del grupo pero en realidad tu hermano y yo,
somos novios.
Matt, me agarró la mano, y me dio
un beso como si dijera que esto es mio y no lo soltaré.
Roberto: Así es, pero ahora te lo
digo, si tú le dices a alguien de que ellos, salen juntos, te meto, la pata de
la silla por el culo.
Ray: Disculpa, Matt, discúlpame
Miguel si te herí.
Yo: Tranquilo, hermano, y que tal
si hacemos eso de Roberto nos dijo.
Matt: Y tus padres, no estarán
cerca.
Roberto: No, hoy estamos sábado,
los sábados mis padres hacen compras, de mañana y no vuelve hasta las 10
tenemos casi una hora y media, además a Inés, le dimos el día libre por cocinar
ayer, hasta tarde por el cumple de Miguel, nadie, nos interrumpirá.
Ray: Y los padres, de Matt.
Matt: Mis padres, hablaron con tu
padre, y le dijeron que volverían por mí a las 12 del día, ya que tuvieron un
percance.
Roberto: Ahora vamos, siempre he
querido hacer esto.
Nos fuimos a nuestro cuarto y
Roberto, ya tenía su verga parada, sus 15,5 centímetros, ya lucían sobre su
bóxer.
Roberto: Vamos esta es la única
vez, que haré esto, ya que me gusta actuar de activo, no de pasivo.
Ray, Matt y Yo, bajamos nuestros
bóxer, nuestras verguitas comparadas con la verga de Roberto, eran pequeñas, la
de Matt, media 12,5 la mía 12,6 y la de Ray 12,9.
Roberto: Únanse más, las tres la
quiero dentro de mi boca.
Nos pusimos pegaditos, mientras
que Roberto chupaba nuestras vergas, yo y Matt, nos basábamos y decidimos unir
a mi hermano Ray, a nuestro beso, los tres sacábamos nuestras lenguas, las
cuales se unían, y nos pasábamos nuestras salivas.
Matt: Saben que, quiero hacer
algo.
Ray: Dale.
Matt: Quiero chupar la verga, de
Roberto
Mientras que mi hermano Roberto,
nos chupaba la verga a mí y a Ray, Matt, le chupaba la verga a Roberto, chupaba
sus bolas, y jugaba con ellas.
Roberto, pajeaba nuestras vergas,
para hacerles sacar un poco de líquido pre seminal, pero aun no nos salía el
liquido que Roberto, quería.
Nos acostamos en el piso, y
Roberto, seguía chupando, Lamia nuestros culos, sudorosos y saboreaba nuestras
vergas.
Matt, se levanto, y nos miro,
mientras pajeaba su verga.
Roberto: Vamos todos a mi cama, y rápido.
Nos fuimos a la cama, de Roberto,
pues es la más grande, y Ray y Matt, se pusieron en cuatro, Roberto cogió su
verga y se la metió en el culo de Ray.
Roberto: Que esperas Miguel,
Matt, te ofrece tu culo.
Yo: No se como hacerlo.
Roberto: Tranquilo, ya tiene su
culo bien dilatado, solo méteselo, y ya, además no vas a sufrir tanto ya que
ayer me lo follé.
Le metí mi verga a mi novio, y Yo
y Roberto comenzamos con nuestro mete y saca, mientras Roberto lo hacia de una
manera rápida yo la hacia de una manera placentera.
Roberto: Me estresas Miguel, vamos
el trencito.
Yo: Que es eso.
Matt: Tienes mucho que aprende,
el trencito es que alguien te folla y ese alguien es follado por otro, así.
Roberto: Ándale, Ray, ponte
adelante.
Ray se puso adelante, seguido por
la verga de Matt, y luego mi verga y Roberto follandome.
Roberto follaba duro, hacia que
hasta mis testículos, entraran en el culo de Matt.
Roberto: Ahhh me vengo,
Roberto saco su verga nos tumbo a
todos en su cama, y nos mojo, con su semen.
Ray: Que rica, follada
Roberto: Ya me dio, sueño,
alguien que se vaya a bañar, sino mi padre, pensará mal de nosotros.
Ray: Me voy a bañar.
Yo: Esta bien.
Roberto se acostó en su cama, con
la verga ya flácida, y nosotros nos acostamos en cada extremo de Roberto.
A mi me encanta oler, las axilas
de mi hermano, siento que su olor a macho, esta concentrado allí.
Roberto estaba acostado de una
manera, de que sus manos estaban entrelazadas atrás de su cabeza, y esa era la
mejor manera de oler las axilas de mi hermano.
Matt: Roberto, creo que te
debemos algo por habernos unido.
Roberto: No tranquilos, no me
deben nada.
Matt: Yo creo que sí.
Matt, cogió la verga de mi
hermano y la hizo erectar.
Roberto: ya no tengo fuerzas, ya
no más por favor.
Matt: Tranquilo, no harás nada,
solo te la chuparemos un rato, queremos, tu verga.
Yo: Si, creo que te debemos algo.
La verga de Roberto se había
erectado de nuevo, como si mi hermano aguantará otra vez.
Empezamos a lamer y a chupar la
verga de mi hermano, mientras este gemía de placer.
Después de unos 7 o 10 minutos la
verga de mi hermano, empezaba a botar su semen, sobre nuestras caras.
Terminamos muy cansados, y nos
acostamos sobre los pectorales de mi hermano, y nos pusimos a conversar.
YO: Este Ray, si se demora para
bañarse.
Roberto: Que tal si lo sorprendemos
y nos bañamos con él.
Matt: Si, vamos a sorprenderlo.
Mi hermano Ray, siempre se baña
con la puerta del baño abierta, y así no se nos hace ningún problema entrar.
Caminamos lentamente, aun
estábamos desnudos, y entramos al baño, hasta que fuimos donde estaba bañándose
Ray, entramos los tres, y nos bañamos, frotamos nuestras vergas, y le pusimos
mucho jabón en la verga de Roberto, Ray, le gustaba que Matt, le toque su pene,
y se frote su culo delante de él.
Nos bañamos paso la media hora, y
salimos y nos cambiamos de ropa, y fuimos a jugar algunos videojuegos.
Mis padres llegaron y trajeron
comida, aunque no comimos mucho porque, estábamos llenos de semen, y comida,
luego nos sentamos en la sala.
Madre: Y bien, vas a abrir los
regalos, o que
Yo: Cierto me olvidaba de los
regalos.
Padre: Anda a verlos está en el
recibidor, anda con Matt, para que te ayude.
Yo: Bueno esta bien padre.
Matt y yo nos levantamos de donde
estábamos y caminamos al recibidor, al
llegar allí, nos dimos un apasionado beso, como novios, y así regresamos como
para que no sospechen.
Roberto: Abre primero los de tus
amigos.
Ray: Si, hermano.
YO: Bueno esta bien.
Abrí el regalo de Pablo, eran dos
camisas de Tommy Hilfiger, y medias puma, el de Alejo era un pantalón gris, el
de Ron eran varios juegos de videojuegos, el de Salomón eran unos jeans, y el
de Javi era una chompa, y el de Matt, era un sobre.
Matt: Vamos ábrelo
Yo: Bueno.
Abrí el regalo de Matt, y tenia
dinero allí, tenia 1000 euros.
Yo: Esto es mucho dinero, no toma
es tuyo, yo no lo quiero.
Matt: Es muy difícil, comprarte
algo así, que tómalo, para que te compres lo que sea.
Yo: Es mucho dinero, tus padres
que dirán.
Matt: Tranquilo, mis padres
también son de la clase alta, y creo que mil euros no les afectan nada.
Martha: Acepta el dinero, hijo es
para ti, no te preocupes, ahora abre el de tu tío y de tus hermanas.
Abrí el regalo de mi tío, eran unos dos perfumes, de los que él
utiliza, siempre he querido tener esos, porque huelen a macho, siempre le digo
que huele rico, y el de mi hermana mayor, era un carro control remoto, y el de
mi otra hermana era una mochila, para el colegio.
Ray: Buenos regalos pero aun
faltan 3 más, el de Roberto, el de papá y mamá
Martha: Abre el que te parezca
más interesante.
Abrí primero el de Roberto, eran
6 bóxers de American Eagle, así como a él le gustan, que en la parte de la
verga sea poco ajustado, para que no le
afecten los huevos.
Luego el de mi madre, eran varias
camisas, y unos que cuantos pantalones
Adolfo: Me moría de ganas que
abrieras el mío.
Cogí el regalo de mi padre, era
rectangular, saque y eran un bate de beisbol y una pelota y un guante.
Adolfo: Miguel, sé que te gusta
el beisbol, miras cada partido y por eso te he comprado eso, y además te inscribí
en una escuela de beisbol así que vas a ir, Theo también esta allí, así que se
podrán hacer compañía, pero hay otra sorpresa más.
Mi padre se levantó de donde
estaba camino hacia la cocina y de una gaveta, saco otra caja así con la misma
forma la misma textura, pero no me la
dio a mi sino a Ray.
Adolfo: Tu hermano también, esta
en la escuela de beisbol, para que se distraigan un rato.
Yo: Gracias, padre por ter tan
amable conmigo y con Ray, gracias por tu regalo.
Agradecí a todos, por sus
regalos, y por uno de los mejores momentos de mi vida.
Luego los padres de Matt, lo
vinieron a ver y les agradecí por dejar a Matt, por dejarlo asistir a mi
fiesta.
Pasaron una semana, y la escuela
de beisbol, ya estaban por empezar, asistimos el primer día, nos hicieron
correr como antílopes, para ver a que grupo pertenecíamos, si al A, B, C, o D.
Mi hermano y yo quedamos en el C
y Theo quedo en el B, pues él es más atlético que nosotros juntos, y comenzamos
a practicar, cuando termino el primer día nos fue a ver mi padre y Roberto, los
cuales se bajaron del carro y hablaron del entrenador.
El entrenador le pregunto a
Roberto que cuantos años tenía, y él le respondió que 15, y que si era rápido
corriendo, y Roberto le contesto que sí, Roberto hizo varias pruebas, para
entrar a los sub-16 del club de Beisbol, y ganaría puntos para él y una beca,
si seguía de largo, los puntos es para cualquier universidad española.
Así que Roberto, quedo como A, y
quedo como ayudante del entrenador, y tenia que ir más que nosotros, nuestros
entrenamientos eran, los lunes, jueves y viernes.
Al llegar a casa, Roberto se baño
de lo sudado que estaba y se tiro a dormir, y nosotros también.
Al siguiente día mi padre fue a
dejar a Roberto a los entrenamientos pues eran las edades de 6-10, y como era
el ayudante, siempre tenía que estar allí.
Nosotros con Leonardito no
habíamos quedado en la casa, jugando algunos videojuegos, y mi madre, le tocaba
turno en el hospital.
Llega mi padre, y se dirige al
salón de videojuegos.
Adolfo: Que dicen chicos, que
quieren hacer hoy, mientras esperamos que sean las 5:30 para que salga Roberto.
Ray: No se padre, estamos jugando
videojuegos, y es muy divertido, quieren intentarlo, vamos conecta la palanca
de Roberto y juega.
Yo: Si, padre.
Adolfo: Bueno es temprano y hace
mucho sol, que tal si salimos a bañarnos un rato, en la piscina, o vamos a ver
los caballos, y les enseño a montar.
Leo: Siiii, a los caballos.
Yo: Bueno Leonardito, ha hablado,
vamos a los caballos.
Adolfo: Bueno vamos, no perdamos
tiempo.
Cogimos las bicicletas, y nos
fuimos a donde los caballos, que quedaba un poco lejos, de nuestra casa.
Ray: Porque no vinimos en carro.
Adolfo: Por dos razones
Yo: ¿Cuáles son?
Adolfo: La primera a los
caballos, les aterra los sonidos fuertes, y yo fui deportista cuando tenia sus
edades, y pues hicimos un poco de deportes, y no se quejen.
Entramos al establo, y miramos
los caballos, mi padre cogió la silla de montar de un estante, alto y se la
puso a su caballo favorito, llamado Bleck.
Bleck era un caballo, de color negro, y era
rápido debido a su raza.
Adolfo: ¿Quien quiere ser, el
primero?
Leo: Yo, yo quiero ser el
primero.
Adolfo: Veo, que si te gustan los
caballos pero te subirás conmigo para que no te caigas.
Mi padre primero subió a
Leonardito al caballo y luego se subió, él. Galopando salieron del establo y se
dirigieron hacia una pradera que quedaba cerca del establo, donde comían los
caballos de mi padre, luego regresaron.
Mi padre se bajo de Bleck, y me
fije que veía con una erección, luego bajo a Leonardito del caballo.
Adolfo: ¿Alguien más quiere?
Yo: Yo, padre, pero quiero ir
contigo, para que me enseñes, (esa fue mi escusa, para que mi padre, rose su
verga con mi culito)
Adolfo: Adelante, pues vámonos.
Me subió al caballo, y él se
sentó tras mió, y sentí que su verga me rompía mi pantalón de mezclilla, por
cada galope del caballo, sentía que era penetrado por la verga de mi padre, al
llegar a la pradera, mi padre se bajo del caballo.
Adolfo: Deja que Bleck, descanse
un rato, y nos vamos.
Yo: Me duelen las piernas, y
muslos, y en especial mis nalgas.
Adolfo: Tranquilo, príncipe, es
debido a los galopes del caballos, ya te
acostumbraras.
Yo: Si padre.
Adolfo: ¿Y ya haz pensado, en que
quieres, te acuerdas que te debo un regalo, por tu cumpleaños?, y a pasado una
semana, y tengo que ver que necesitas.
Yo: Bueno padre, primero quiero
agradecerte, por todo, primero, por darme una familia, y darme la oportunidad
de vivir de nuevo porque en la casa de adopción pensaba que pasaba por
desapercibido, y no sabia que existía otra esperanza, y dos por darme todo,
creo yo que no me falta, nada más.
Adolfo: Gracias, hijo, sabia que
tu eras un niño muy especial, y que traerías algo especial para la familia, y
si lo trajiste, porque casi se rompe nuestra familia, en dos.
Yo: Porque padre, no pensé que
era especial, solo común.
Adolfo: Llevas casi seis años en
nuestra familia, y tu madre, se enteró de que Leonardito, era un producto, de
relación amorosa, con esa persona, pero nunca me gusto, además yo respeto a las
mujeres, y quiero que tu seas así, fui criado por padres, así y quiero que mis
cuatro hijos varones, hagan lo mismo.
Yo: Bueno, padre hay una chica en
mi salón, que me gusta mucho, su nombre es Anita, y la quiero mucho, y la
respeto como amigos, y quiero que ella sea mi novia.
Adolfo: Bueno, veo que voy a
tener esta conversación de nuevo.
Yo: Cual, no me des aun ese
paquetito que le distes a Roberto.
Adolfo: No, no, ese paquetito es
después, pero dependiendo de como es Ana, y si estarás listo.
Yo: Y cual es la conversación.
Adolfo: Si tu quieres a una
mujer, hazla saber que la quieres mucho, sin importar nada más, pero se fiel a
ella, no seas mujeriego, con todas las que veas, solo se fiel a una sola,
además tienes 13 años y creo que es una estupenda idea que tengas novia.
Yo: Gracias, padre, y como le
digo.
Adolfo: En la vida, solo se
necesito 20 segundos de valor, y mucha valentía, ese consejo me dijo tu abuelo,
pero no lo escuche, además tu madre salió embarazada de tu hermana mayor, y
bueno tuvimos que salir ante una sociedad.
Yo: Gracias, seguiré tu consejo.
Adolfo: ¿Sabes si hay una chica,
que a tu hermano Ray, le guste?, porque ya va a cumplir 13 y no quiero que se
me quede botado.
Yo: Aún, no se padre, pero te lo
haré saber, y del regalo te lo pediré algún día.
Adolfo: Bueno regresemos, si
quieres saber, algo.
Regresamos al establo en el
caballo, y Ray estaba con Leonardito.
Adolfo: Bueno vamos Ray, te toca.
Ray: Al fin, se demoraron mucho.
Yo: Bleck, estaba descansando.
Adolfo: Miguel, cuida a tu
hermano.
Yo: Tranquilo, anda.
Mi padre y Ray, se fueron y
tardaron un poco, casi 15 minutos, y mi padre, guardo a Bleck, en el establo y cerró todo, para que
el frio de la noche no afecte a los caballos.
Adolfo: Andando, vamos a la
piscina, un rato, aun faltan 2 horas para ir a ver a Roberto.
Yo: Esta bien, cuando llegamos
déjanos cambiarnos, de camisetas.
Cogimos las bicicletas y salimos,
del establo nos dirigimos a la casa, y nosotros nos fuimos a nuestro cuarto a
cambiarnos de camiseta, a camisetillas, para no quemarnos el cuerpo, y bajamos
mi padre, ya estaba allí.
Adolfo: Inés, disculpa puedes
traernos, unos sándwiches de jamón y algunas bebidas, para mi y los niños.
Inés: Ok señor, ya se los traigo.
Mientras, Inés preparaba los
sándwich, nosotros nadábamos y yo pasaba cerca de la verga de mi padre, y a
veces se la tocaba.
Pasamos una hora y nos salimos, y
nos fuimos a nuestro cuarto para cambiarnos de ropa e ir a ver a Roberto.
En nuestro cuarto Ray, me comenzó
a ser preguntas.
Ray: Oye, Miguel, nuestro padre
te hizo preguntas
Yo: Como cuales, que preguntas,
dime
Ray: Como si te gusta una chica,
o algo así, si te masturbas o ves porno.
Yo: No, todas las preguntas no me
hizo solo, la primera.
Ray: Yo tengo 12 años ya me falta
poco para los 13 y me preguntó eso.
Yo: Tranquilo, sabes lo que me
dijo Roberto, que conoció a tu padre, físicamente, y que su verga era gigante
Ray: Si, yo sabia que la verga de
mi padre, era gigante, lastima que no este conmigo.
Yo: Si, disculpa mucho, pero
igual tienes una familia, que te quiere.
Ray: Si, y de tu regalo que te
debe, que harás que pedirás.
Yo: Si, hermanito, pediré algo
que nos ayude a los dos.
Ray: Ya quiero, ver que es.
Salimos, y nos subimos al carro,
ya que nuestro padre, nos estaba esperando, y nos fuimos a ver a Roberto, mi
padre manejo casi unos 20 minutos, y el otro ayudante del profesor nos dijo que
Roberto había tenido un problema.
Mi padre se preocupo porque no
vio a Roberto y le preguntó que cual era el problema, y este le respondió que
jugando, le habían pegado en las bolas, pero que ya lo habían llevado a
enfermería.
Esperamos a Roberto y salió, en
bóxers, y camiseta, sus pantalones de beisbol blancos estaban llenos de tierra,
tenia sus zapatos en sus manos, y caminaba, lento hacia al carro.
Se subió al carro y mi padre le
dijo que si estaba bien, que si no necesitaba ir al hospital donde trabaja mi
madre, para que alguien le revise, pero él dijo que estaba bien, que solo fue
un error, y que le dieron una pastilla, para el dolor.
Roberto se retiro un poco antes
casi 30 minutos antes y le dieron vacaciones por una semana, en el trabajo,
aunque tenia particas de la liga, pero no fue, al llegar a casa, Roberto se fue
a bañar, dejo sus pantalones y su camisa en el cuarto de lavado, y subió en
bóxers, a al cuarto.
Cuando entró a bañarse, se saco sus
bóxers de Eagle American, verdes y cerro la puerta.
Yo cogí sus bóxers, y tenia
semen, en la parte de la vega, y el olor corporal de mi hermano sudado.
Era muy rico, mi verga se erecto
y yo me quiera pajear.
Salí, hacia el cuarto de música,
con los bóxers de Roberto, y me pajee, mi liquido pre-seminal, ensució los
bóxers, de Roberto y salí y los deje allí.
Pasó una semana, e invite a
salir, a Ana, mi padre, nos llevó a Mc Donalds, y nos esperó afuera. Comimos
papas, hamburguesas y bebidas, pedí helado, y comimos.
Ana: Gracias, por ser tan lindo
conmigo.
Yo: Quiero, pedirte algo, hace
mucho tiempo, he querido decírtelo.
Ana: ¿Qué cosa, dime?
Yo: Quieres, ser mi novia.
Ana: Bueno, te diré algo antes.
Yo: No me digas, que no, siempre
me haz gustado, y he decidido decírtelo
Ana: Tranquilo, te digo que sí,
tu también me gustas mucho, y te quiero.
Yo: Gracias, así que somos
novios.
Ana: Si
Me acerque a Ana, y le di un beso
en la mejilla.
Pague, y nos salimos.
En el carro, mi padre, no decía nada,
solo veía que nos cogíamos de la mano, y solo sonreía, llegamos a la casa de
Ana, a dejarla, pues sus padre, se iban de viaje y se iba a quedar con su
abuela.
Me senté adelante, e iba conversando
con mi padre, y le pedí permiso para invitar a Matt, a dormir.
Me dijo que le dé, el número del
padre de Matt, para pedirle permiso, se lo di, y llamó al padre de Matt, y le
dijo que sí.
Fuimos a ver a Matt, y yo subí a
su cuarto, y nos dimos un beso.
Bajamos, y nos subimos al carro,
y nos fuimos para la casa.
Muy buena historia. Sube más
ResponderEliminarCreo que tu papa quiere que le pidas de regalo que te folle , sube mas historias !!!
ResponderEliminarSube más. Cuando súbiras más
ResponderEliminarQué paja que me hice por dios!!! Sube más soy fan tuyo
ResponderEliminarme justas mucho me justaria que me cojeras
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